Por América Torres

La ATS recomienda no tomar en cuenta la raza ni la etnia para interpretar las espirometrías de los pacientes. Esta organización emitió esta declaración oficial apenas semanas después de que la Global Initiative for Chronic Obstructive Lung Disease publicara su GOLD Report 2023, el cual todavía considera dichos factores.

El panel de autores a cargo del comunicado de la American Thoracic Society señala que el cambio era necesario. Ellos consideran que tener en cuenta la raza y el origen étnico a la hora de interpretar las espirometrías y otras pruebas de función pulmonar (PFP) puede contribuir a tener una visión inexacta de las diferencias raciales. Además, puede enmascarar los efectos de las exposiciones diferenciales.

La ATS menciona que el racismo en las PFP se remonta al presidente de los Estados Unidos, Thomas Jefferson. En 1785, señaló que había «diferencias y deficiencias» en el “aparato pulmonar” de los esclavos africanos, comparado con el de “los blancos”.

Muchos años más tarde, conforme la espirometría se generalizó, las explicaciones de las diferencias comenzaron a expandirse más allá de «un factor racial» para incluir una gama más amplia de factores como las infecciones pulmonares, el humo del tabaco, la contaminación, el clima y la nutrición. En muchos entornos clínicos y ocupacionales, el ajuste por raza se consideraba una forma de evitar la disparidad y la discriminación.

En contraste, en la década de los 80´s (en pleno apartheid), el trabajo del epidemiólogo Jonny Myers y el neumólogo Neil White se opuso a las nociones de las diferencias raciales innatas. Estos investigadores sudafricanos se habían dedicado a estudiar la salud de los trabajadores que laboraban en minas y en la industria manufacturera. Cuatro décadas antes que la ATS, ellos ya argumentaban que las diferencias no eran biológicas, sino meramente sociales y llamaron a utilizar un estándar universal. Algo que no se consideró hasta ahora.

La ATS opina que considerar la raza y la etnia puede acentuar las disparidades de salud. Clasificar de esta manera a los pacientes desafía la noción de que las categorías raciales y étnicas tienen un significado biológico y cuestionan el uso de la raza en la interpretación de PFT.

En el 2021, esta organización convocó a un grupo diverso de médicos e investigadores para participar en un taller con el objetivo de evaluar dichos factores en la interpretación de las pruebas de función pulmonar. En esa reunión se analizó la evidencia disponible hasta ese momento, así como los retos de la práctica de los especialistas. Después de las discusiones del grupo participante, llegaron a la conclusión que ya mencionamos al principio de este artículo. Asimismo, se mencionaron los siguientes puntos:

• Se recomienda reemplazar las ecuaciones específicas de raza y etnia en la interpretación de las PFP y reemplazarlas con ecuaciones de referencia promedio neutrales en cuanto a la raza.
• Se sugiere de una revaluación más amplia del uso que se les da a las PFT para tomar decisiones clínicas, de empleo y de seguros.
• También hubo un llamado a involucrar a las partes interesadas clave no representadas en este taller y una declaración de precaución con respecto a los efectos inciertos y los daños potenciales de este cambio.
• Otras recomendaciones incluyen investigación y educación continuas para comprender el impacto del cambio, mejorar la evidencia para el uso de PFT en general e identificar factores de riesgo modificables para la función pulmonar reducida.

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Si desea leer el comunicado completo de la ATS, haga clic aquí.